Una planta más eficiente y eficaz para British American Tobacco en Rumanía
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Para su planta de Ploiesti (Rumanía), la tabacalera ha optado por soluciones de climatización a medida que permitirán una explotación más eficaz de sus equipamientos, que incorporarán nuevas líneas de producción. Todo ello reducirá la factura energética y, a la vez, mejorará la competitividad.
La innovación es vital para la industria tabacalera, que debe adaptarse a unos clientes que se preocupan por su salud pero no quieren renunciar al placer de fumar. British American Tobacco (BAT) aspira a convertirse en el primer fabricante mundial con la última generación de productos basados en el tabaco sin combustión. Con este objetivo, la multinacional ha decidido invertir unos 800 millones de euros durante un periodo de cinco años en su planta de Ploiesti, en Rumanía, para transformar las instalaciones y crear líneas de producción de tabaco para calentar destinado al mercado europeo.
Las especificaciones técnicas de este proyecto de transformación son inusuales: respetar las normas específicas del sector tabacalero y, a la vez, optimizar la factura energética, todo ello en un entorno de estricto control de la calidad. Esto es lo que ha llevado a BAT a contar con dos empresas de VINCI Energies en Rumanía, TIAB HVAC y Actemium Electric Ploiesti, para instalar todos los sistemas mecánicos, eléctricos, tecnológicos y de protección contra incendios.
Entre todos los sistemas que constan en la declaración de trabajo, « hay que prestar especial atención al diseño de los sistemas de ventilación y aire acondicionado, que consumen una gran cantidad de energía », comenta Dragos Filoneanu, responsable de la dirección de obra de BAT, que se muestra muy satisfecho con « la apuesta por unos equipamientos innovadores y de gran eficiencia energética », que permiten « reducir la huella de carbono y, a la vez, mejorar la competitividad de la empresa ».
Requisitos aparentemente incompatibles
Las soluciones técnicas que ofrece TIAB HVAC para la planta de Ploiesti responden a unas exigencias aparentemente incompatibles, como limitar la factura energética y, a la vez, mantener unas determinadas condiciones ambientales durante todo el año. « La temperatura debe estar sometida a un control estricto y la humedad relativa no debe apartarse más de un 5 % del valor óptimo », explica Alexandru Cristea, director de TIAB HVAC. Estos requisitos representan un auténtico desafío en un país donde las temperaturas oscilan entre –15 °C y +33 °C, pero cada vez con más frecuencia alcanzan valores extremos de hasta –25 °C en invierno y +40 °C en verano. Esta amplitud térmica conlleva un gasto energético considerable. « La elección de soluciones como un sistema de recuperación de energía o sistemas de refrigeración flexibles contribuirá a optimizar los costes », añade.
« La clave del proyecto es la colaboración con un equipo que domina las últimas tecnologías de ahorro energético y es capaz de diseñar soluciones a medida. »
Este proyecto, que forma parte de una ampliación de la planta de Ploiesti, debe llevarse a cabo sin que se interrumpa la producción actual. “Es uno de los mayores retos del proyecto”, destaca M. Cristea, que añade que, por motivos de seguridad, los técnicos de VINCI Energies han tenido que recibir una formación especial. Tienen que trabajar a 12 metros de altura en las azoteas, en invierno, con temperaturas generalmente bajo cero, para instalar la unidad de producción de agua fría y los equipos de tratamiento del aire, un elemento importante de nuestra actividad.
Para Dragos Filoneanu, directivo de BAT, “la clave del proyecto es la colaboración con un equipo que domina las últimas tecnologías de ahorro energético y es capaz de diseñar soluciones a medida, adaptadas a nuestras necesidades específicas en cada fase del proyecto y de su realización”. Para ello, trabaja en “soluciones ecoenergéticas y respetuosas con el medio ambiente que nos permiten lograr un importante aumento de la productividad”. Está previsto que la nueva planta esté plenamente operativa a finales del 2019.
