Ir directamente al contenido de la página Ir a la navegación principal ir a investigar

GRTgaz ha diseñado, junto con siete socios, una planta experimental para probar el procedimiento Power-to-Gas, que consiste en convertir la electricidad verde en hidrógeno o en metano. Actemium está presente en este proyecto, que abre una vía prometedora para el almacenamiento de la energía.

Jupiter 1000 es un proyecto de demostración industrial de Power-to-Gas lanzado en el año 2014 por GRTgaz y que entró en funcionamiento en febrero del 2020. La instalación, ubicada en la población de Fos-sur-Mer (sur de Francia), en una plataforma de innovación destinada a la transición energética, tiene como finalidad transformar la electricidad procedente de energías renovables (eólica, solar…) en gas para poderla almacenar.

El procedimiento consiste en convertir en hidrógeno el excedente de electricidad verde producida, utilizando para ello dos electrolizadores con tecnologías diferentes: PEM (membrana) y alcalina, con el fin de probar el rendimiento de cada una de ellas. El hidrógeno producido de este modo se inyecta en la red de transporte de gas de GRTgaz y de Teréga, que gestiona la red en el suroeste de Francia.

«Este contrato nos permite emprender la transición del gas natural al hidrógeno junto a un actor histórico, GRTgaz»

Al facilitar el equilibrio de las redes eléctricas y aprovechar los excedentes de producción, la electrólisis favorece el desarrollo de las energías eléctricas intermitentes, aún inestables debido a las dificultades para almacenar la producción.

Con el proyecto Jupiter 1000, cuyo objetivo es alcanzar una producción de hidrógeno de 200 m3/h gracias a una instalación de 1 MWe, también se prevé probar la producción de metano de síntesis. Gracias a una unidad de captación de CO2 en las chimeneas de la fábrica contigua de Swiss Steel Group (anteriormente Ascometal) y a una unidad de metanización, la instalación de Fos-sur-Mer permite agregar una etapa a la electrólisis convirtiendo el hidrógeno producido y el CO2 reciclado en metano de síntesis. Está previsto que esta parte del proyecto dedicada a la metanización entre en funcionamiento a finales del 2020.

En el proyecto Jupiter 1000 participan siete socios jutno a  GRTgaz: la eléctrica Compagnie nationale du Rhône, que suministra electricidad procedente de fuentes renovables a través de sus centrales eólicas y solares; RTE (red de transporte eléctrico); McPhy Energy (electrolizadores); Khimod/CEA (metanizador); Leroux & Lotz Technologies (captación de CO2); Teréga (inyección en las redes de gas), y el gran puerto marítimo de Marsella Fos (producción de electricidad a través de energía eólica).

Actemium, seleccionada para las obras de EIA

Actemium Laxou (VINCI Energies), con una trayectoria reconocida como contratista de GRTgaz en sus proyectos de infraestructuras de gas en Francia, ha sido seleccionada a través de un concurso público para realizar la integración del conjunto de las obras de EIA (electricidad, instrumentación y automatismo) del proyecto.

“Además de implantar las instalaciones de alta y baja tensión, hemos gestionado los diferentes paquetes (compresores, unidad de metanización y electrolizadores) y hemos instalado el sistema de análisis y de conteo de los diferentes componentes (hidrógeno, THT, gas natural, monóxido de carbono…), así como toda la instrumentación. Además, ponemos a disposición de cada socio los datos que se obtienen en la instalación”, detalla Frédéric Niciejewski, gerente de la empresa. Actemium Laxou también se ha encargado de la parte de ciberseguridad del proyecto, de acuerdo con los requisitos de la ANSSI (Agencia nacional francesa de seguridad de los sistemas de información) adoptados por GRTgaz.

“Este contrato de unos 3 millones de euros nos permite emprender la transición del gas natural al hidrógeno junto a un actor histórico, GRTgaz”, añade. “Para nosotros, es una oportunidad de consolidar y ampliar las competencias de nuestros equipos, y abrir una puerta de entrada a un mercado prometedor, sostenido por un amplio plan de inversión europeo que debería favorecer, a la larga, el desarrollo de una red específica de transporte de hidrógeno”.

De hecho, dentro de esta nueva dinámica alrededor del hidrógeno, el Power-to-Gas se perfila hoy como la tecnología más adaptada al almacenamiento de larga duración que permite aprovechar los excedentes de electricidad procedente de energías renovables.

19/11/2020