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Para responder a unos mercados cada vez más exigentes, los industriales deben emprender primero obras de ingeniería en sus líneas de producción. Este es el ejemplo de un gran fabricante automovilístico y Actemium en Alemania.

El desarrollo de modelos de producción hiperágiles, adaptados a las necesidades de cada cliente, abre una nueva página en la historia industrial.

Es una de las grandes promesas de la transformación digital en el mundo industrial: permitir a las empresas ganar capacidad de reacción para desarrollar ofertas más personalizadas. Frente a la presión de unos mercados cada vez más volátiles y de unos clientes cada vez más exigentes, los industriales deben acercar sus procesos a la demanda, lo que requiere adaptar sus cadenas de producción.

La producción personalizada procede de una larga evolución de los grandes esquemas industriales. En los años cincuenta, el sistema fordista se dedica a producir bienes estandarizados para un público masivo. Treinta años más tarde, el modelo toyotista sigue centrándose en los mercados masivos, pero con una producción lo más ajustada posible. Es el inicio del lean, que permite al cliente elegir, gracias a la existencia de diversas opciones, un producto en parte personalizado.

Actualmente se escribe otra nueva página de la historia industrial que se inicia con el desarrollo de modelos de producción hiperágiles, adaptados a la demanda de cada cliente (flexibilidad), así como a la diversidad de la demanda (reconfiguración). Y todo ello, tanto en business-to-business (BtoB) como en business-to-consumer (BtoC).

Bajo pedido y a medida

La personalización puede adaptarse a formatos diferentes: producción bajo demanda o producción a medida. En el primer caso, la producción solo se lanza cuando se confirma un pedido. Solo se fabrica o solo se monta lo que efectivamente se va a vender, y no lo que dictan las previsiones de ventas. Este sistema presenta importantes ventajas: stocks limitados o incluso inexistentes, eliminación del riesgo de invendidos, aceleración de los plazos de ejecución, rápido acceso al mercado de los productos o las innovaciones (time to market) y posibilidad de probar los mercados antes de aumentar las capacidades.

La producción personalizada procede de una larga evolución de los grandes esquemas industriales.

Por su parte, la producción a medida consiste en crear desde cero un producto único, conforme a las especificaciones del cliente. Este enfoque, que tiene el gran mérito de crear una relación de intimidad con el cliente y de permitir recopilar una valiosa cantidad de datos con fines de marketing, se desarrolla rápidamente en sectores como la óptica o la moda.

Tanto en la producción bajo pedido como en la producción a medida se persigue satisfacer las necesidades de los clientes con una oferta más o menos personalizable, reducir el coste de producción gracias a la robotización y agilizar la fabricación.

Retrofit en un gran fabricante automovilístico en Alemania

Para ser completa, la agilidad industrial debe buscarse desde el inicio de los mismos procesos de fabricación, llegando hasta la elección de la distribución y el funcionamiento de las cadenas y los flujos de producción, una condición que requiere conocimientos punteros de ingeniería.

Para ilustrar este enfoque, analizamos el ejemplo de un gran fabricante automovilístico durante estos últimos meses. Este grupo alemán ha emprendido importantes obras de renovación y de reconfiguración de algunas de sus plantas de producción.

En su fábrica de la región de Baden-Württemberg, situada cerca de Stuttgart, los talleres de pintura han sido sometidos a una transformación total de las líneas de manipulación automatizada. La operación de retrofit eléctrico, encargada a Actemium Guebwiller Handling Systems y Actemium Mulhouse Plant Solutions, consiste en actualizar las líneas de producción según los últimos estándares incorporando las normas de seguridad más recientes.

El pliego de condiciones que se presentó a las dos empresas de VINCI Energies incluía una cláusula organizativa crítica: había que sustituir los motores, los variadores y los armarios durante el período de producción.

Nueva plataforma de montaje

También en Alemania, a pocos kilómetros de Baden-Baden, está en marcha un proyecto aún más complejo para este fabricante automovilístico. A partir del 2024, la empresa comercializará nuevos vehículos y, para ello, ha querido dotar su fábrica de una nueva plataforma.

“Se nos ha encargado adaptar los cuatro grandes flujos anexos: ruedas, asientos, mecánica y trenes anterior y posterior. Se trata de un trabajo de instalación industrial, de conocimiento experto, de manipulación y de ingeniería eléctrica que requiere tener en cuenta todo el entorno (estructuras de enganche, cintas transportadoras, pasarelas) e inventariar todos los elementos implicados que hay que desmontar o modificar”, explica Patrick Benard, director de VINCI Energies France Industrie Nord Est.

La intervención de Actemium comprende el estudio, la realización, el montaje y la puesta en servicio de dos líneas. El inicio en preproducción tendrá lugar en septiembre del 2023, y la producción en serie debería iniciarse durante el 2024, con lanzamientos hasta el 2027.

16/05/2023